-Perdone, es que esta máquina es "especial".
A lo que uno de los hombres me contesta:
-Tú también eres especial .
Yo le miré, sorprendida y le di las gracias con toda sinceridad. Se marcharon a proseguir su visita y ya no les volví a ver. No es que sean las primeras personas que me han dirigido palabras de agradecimiento o me hayan hecho sentir valorada, pero sí el hecho de que usara la palabra "especial".Y sobre todo tras un encuentro tan breve.
Llevo unas semanas muy feliz. O más bien satisfecha por mi evolución como persona sobre todo en éste último año. Me falta mucho por recorrer, pero esa satisfacción se ha traducido en un estado casi permanente de felicidad, de sonrisas sinceras en el trabajo a todo el mundo,y eso el mundo lo ve y lo aprecia.
Y no sé si será casualidad o es una consecuencia de las sonrisas, pero se ha reducido el número de personas desagradables que se me acerca.
Sonreír debería ser la norma, no la excepción.
¡Sonriamos ,pues!
2 comentarios:
Hola! Me encanta tu blog y el buen rollo que desprende :D Me identifico,hay que sonreír más y ser positivos :) Te sigo! ^^
Gracias Kranky, me alegra que te guste y que te quedes. :)
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